Hernán Villarrea, Secretario de Movilidad, comunicó que el aumento de la tarifa del transporte público podría llegar a 21.50 pesos a finales de este año.
Después de que el aumento de tarifa se diera sin previo aviso y exclusivamente en la plataforma de “Me Muevo” y “Urbani”, y pese a que los usuarios hayan manifestado por redes su descontento con tal decisión y el Congreso se opusiera a esta medida, el gobierno de Nuevo León sigue firme en la alza de tarifa y su potencial continuo incremento.
Este aumento potencial obedece a un análisis de costos que el gobierno realiza para atender las necesidades de los transportistas y garantizar la operatividad del sistema. Según Villarreal, esta medida afectaría a las rutas urbanas y se implementaría en beneficio de los pasajeros que necesitan transbordar entre diferentes sistemas de transporte.
El anuncio del aumento ha generado inquietud entre los usuarios, que ya se vieron afectados por un alza reciente de 12 a 15 pesos, aplicado solo a los camiones que cuentan con el sistema de pago “Me Muevo” y “Urbani”.
Villarreal calificó esta medida como “un ajuste de emergencia” necesario para enfrentar los altos costos operativos. Sin embargo, dejó abierta la posibilidad de un nuevo incremento para asegurar la sustentabilidad del servicio.
El funcionario explicó que este ajuste no debería representar un cambio drástico para quienes transbordan, ya que actualmente deben pagar dos tarifas separadas. Además, justificó que los incrementos buscan resolver la falta de ingresos de los transportistas y mejorar las condiciones de trabajo de los operadores.
El Paulatino Aumento de Tarifas Está en Revisión
De acuerdo con Villarreal, la tarifa de 15 pesos anunciada es solo una medida temporal. La Comisión de Tarifas revisará nuevamente el costo del transporte en los próximos meses, y para fin de año podría aprobarse un incremento adicional. Según el funcionario, la revisión constante es necesaria debido a los años de estancamiento en los precios que han afectado el mantenimiento y la calidad del servicio.
Villarreal destacó que la situación ha llegado a un punto crítico, lo que hace urgente una nueva revisión tarifaria. Afirmó que este ajuste permitiría al sistema de transporte enfrentar los gastos de operación, ya que los ingresos actuales no cubren los costos de mantenimiento y de personal. La falta de una actualización en las tarifas, dijo, se traduce en problemas financieros para los choferes y en una baja calidad del servicio que reciben los pasajeros.
Los transportistas han señalado que sin un aumento, la operación del sistema no es sostenible. Los usuarios, por otro lado, temen que el incremento pueda impactar sus bolsillos, especialmente para quienes realizan varios transbordos al día. Sin embargo, la Secretaría de Movilidad insiste en que el alza es necesaria para garantizar la viabilidad del transporte público en el estado.
El Congreso y la CEDH Se Oponen y Critican el Incremento de la Tarifa
El aumento tarifario también ha recibido fuertes críticas desde el Congreso de Nuevo León. Legisladores como Aile Tamez, presidenta de la Comisión de Movilidad, mostraron su desacuerdo, argumentando que la decisión del Gobierno de incrementar la tarifa afectará principalmente a las familias que dependen del transporte público. Tamez cuestionó la falta de transparencia en el proceso, indicando que el ajuste no fue discutido en el Consejo de Movilidad, y que la medida fue implementada de manera inadvertida.
Tamez agregó que desde el Congreso se buscará revertir esta decisión y que se convoque al Consejo de Movilidad para revisar la viabilidad del aumento. Señaló que el gobierno no debería imponer estos ajustes sin considerar el impacto en los ciudadanos, y recalcó que las tarifas deben ser revisadas en función de la calidad y la disponibilidad del servicio.
Por su parte, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), a través de su presidenta, Susana Méndez, también se pronunció en contra del aumento, calificándolo como una violación a los derechos humanos. Según Méndez, el alza debió considerar primero el contexto económico de los usuarios y la calidad del servicio ofrecido. La CEDH expresó su preocupación por los efectos económicos en los sectores más vulnerables y la falta de garantías sobre la calidad del servicio que reciben los usuarios.
Impacto Económico en el Bolsillo de los Usuarios
Méndez destacó que muchas personas deben esperar largos periodos para abordar el transporte, además de soportar una de las tarifas más altas a nivel nacional. La presidenta de la CEDH enfatizó que este tipo de decisiones requieren un análisis profundo que considere no solo la sostenibilidad financiera de los transportistas, sino también el bienestar de la población.
Tanto la CEDH como el Congreso coincidieron en que el incremento debió analizarse a fondo y plantearon que las autoridades deben abordar problemas como la calidad, la frecuencia de las unidades y la seguridad en el servicio. Hasta ahora, el Gobierno de Nuevo León sostiene que el ajuste es necesario para mejorar la situación financiera de los transportistas, mientras que los usuarios y organismos públicos demandan una revisión más exhaustiva de las políticas tarifarias.