El Par Vial presenta fallas constantes que provocan encharcamientos, incluso con lluvias menores. Especialistas en hidrología e ingeniería vial advierten que el mal diseño de pluviales, la inclinación inadecuada de las calles y la basura acumulada impiden un correcto desagüe. Estas condiciones afectan a Constitución y Morones Prieto, vialidades que bordean el Río Santa Catarina.
Par Vial Falla Por Pluviales Insuficientes Y Mal Diseñados
Los encharcamientos en el Par Vial se repiten cada temporada de lluvias. Expertos señalan que la insuficiencia de los pluviales y su mal diseño son las principales causas. En varios tramos de Constitución, los carriles carecen de drenajes adecuados, lo que provoca que el agua se acumule y obstaculice el paso vehicular.
Por ejemplo, al descender del puente de Venustiano Carranza, los automovilistas se enfrentan a un charco constante. En esa zona, los pluviales más cercanos son pequeños, están dañados y no reciben el agua porque la rasante de la calle no dirige el flujo hacia ellos.
En otras partes de Constitución, como en el Barrio Antiguo, la situación se repite. Allí existe un drenaje, pero permanece obstruido por basura, lo que inutiliza la infraestructura. La falta de mantenimiento refuerza el problema y convierte el área en un punto crítico durante las lluvias.
Morones Prieto Con Problemas Recurrentes
La avenida Morones Prieto también refleja las deficiencias del Par Vial. El lunes, un encharcamiento severo se presentó a la altura de la calle Raúl Calderón. La pendiente pronunciada conduce el agua hacia la intersección, pero no existen pluviales para desaguarla.
El doctor Víctor Hugo Guerra Cobián, especialista en Ciencias del Agua, asegura que uno de los factores es el mal diseño del drenaje. Según explicó, muchos colectores carecen de estructuras complementarias que permitan captar el agua de manera eficiente.
Las obras viales, como pasos a desnivel y jorobas, complicaron la capacidad de descarga. Aunque existen colectores que descienden desde la Loma Larga y la Independencia, la urbanización ha limitado su efectividad. El resultado es que la infraestructura no cumple su función y los encharcamientos persisten.
Rasantes Mal Planeadas Y Basura Acumulada
El experto en ingeniería vial, Sergio Joel Vargas, coincide en que los problemas del Par Vial son recurrentes. Explica que las calles tienen inclinaciones hacia puntos donde no hay bocas de tormenta ni drenajes. Esto significa que el agua se acumula sin salida hacia el río.

Además, la basura juega un papel clave en agravar la situación. Los desechos bloquean los pluviales y reducen su capacidad de absorción. Incluso un sistema de drenaje bien diseñado pierde eficacia si no recibe mantenimiento adecuado.
Ambos especialistas resaltan que la combinación de mal diseño, rasantes inadecuadas y falta de limpieza multiplica los riesgos. No se trata solo de lluvias intensas, ya que en el Par Vial los encharcamientos aparecen incluso con precipitaciones menores.
Consecuencias De Un Problema Estructural Del Par Vial
Las fallas en el Par Vial tienen consecuencias más allá del tráfico. Los encharcamientos afectan la seguridad de los conductores, generan daños en vehículos y aumentan el riesgo de accidentes.
Además, los estancamientos de agua deterioran el pavimento con mayor rapidez. Las reparaciones frecuentes implican más gastos públicos, lo que refleja una planeación deficiente desde el origen.
Los expertos advierten que mientras no se corrija el diseño de drenajes y rasantes, el problema seguirá repitiéndose. Invertir únicamente en reparaciones temporales no resuelve el origen de la falla.
Urge Una Solución Integral Al Par Vial
Los especialistas concluyen que el Par Vial presenta fallas estructurales que requieren un plan integral. No basta con instalar más pluviales o reparar los existentes. Se necesita un rediseño de rasantes y una estrategia permanente de mantenimiento para evitar que la basura los obstruya.
La infraestructura de Monterrey no puede seguir respondiendo con medidas improvisadas. Cada temporada de lluvias, las mismas vialidades se inundan y los automovilistas pagan las consecuencias. Sin un replanteamiento técnico, el Par Vial seguirá siendo un punto crítico cada que caigan precipitaciones.
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