El panorama político en Monterrey, Nuevo León, se vio sacudido cuando Samuel García, el fugaz precandidato presidencial de Movimiento Ciudadano (MC), se vio envuelto en investigaciones que podrían cambiar el rumbo de su carrera política. Las acusaciones no solo provienen de sus detractores del “PRIAN”, sino también de las propias sombras que la 4T arrojó sobre él y su familia.
Samuel García: acusado de lavado de dinero y prácticas ilícitas
En la contienda por la gubernatura de Nuevo León en 2021, García se enfrentó a duras críticas de sus competidores por sus prácticas ilíticas. Sin embargo, más allá de la guerra sucia, salieron a la luz investigaciones que pusieron al descubierto prácticas cuestionables.
Según la Unidad de Inteligencia Financiera, dirigida por Santiago Nieto en ese momento, se encontraron pruebas sustanciales de operaciones con recursos de procedencia ilícita. En el 2012, se rastrearon transferencias por más de 26 millones de pesos a Samuel García desde Grupo Renok, una entidad señalada como “facturera” por el SAT.
Corrupción familiar: padre de Samuel García vinculado a triangulación de recursos
Las pesquisas también revelaron un esquema de concentración y triangulación de recursos en el que participaban varias empresas vinculadas a Samuel García y su padre, Samuel Orlando García Mascorro. Entre 2016 y 2019, Saga Tierras y Bienes Inmuebles, donde el gobernador de Nuevo León es accionista, recibió cerca de 172 millones de pesos en 56 operaciones bancarias. Estos fondos provenían de tres razones sociales vinculadas con su padre, generando sospechas sobre la justificación de dichas transferencias.
Además, la falta de actividades identificables en Saga, junto con retiros en efectivo por hasta 17 millones de pesos desde esta razón social, añaden un componente preocupante a las investigaciones.
Mariana Rodríguez y su padre también involucrados
Las indagaciones no solo afectan a Samuel García, sino que también involucran a su esposa Mariana Rodríguez y a su suegro Jorge Rodríguez Valdez. Operaciones con empresas señaladas por comportamientos inusuales en el sistema financiero han puesto en riesgo la reputación política del político y su familia.
Movimiento Ciudadano se desgasta
El escándalo en Nuevo León, sumado a la desaprobación del alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, y los cuestionamientos internos en MC, revelan un descalabro político para el partido. Las críticas de Enrique Alfaro en Jalisco, las críticas contra el candidato Álvarez Máynez y la reciente adhesión de Héctor Hugo Hernández a un grupo opositor en la CDMX aumentan la percepción de que Movimiento Ciudadano se desfonda a una velocidad alarmante.
En este contexto, el futuro político de Samuel García y la estabilidad de MC en Monterrey se ven amenazados. Las investigaciones en curso podrían ser la piedra angular que cambie el rumbo de las decisiones electorales en la región.