El emecista Glen Villarreal, Secretario General de Movimiento Ciudadano (MC) en Nuevo León, ha sido señalado por participar en una red de empresas factureras que ha desviado más de 25 millones de pesos a través de 17 compañías fantasmas. Este dirigente, quien se ha presentado como un defensor de la honestidad política, se encuentra ahora bajo escrutinio por prácticas que van en contra de los principios que supuestamente representa.
Bajo la fachada de empresas aparentemente legítimas, Villarreal ha llevado a cabo operaciones turbias con un entramado de compañías interconectadas, muchas de las cuales han sido disueltas rápidamente después de su creación. Este modus operandi es característico de las redes factureras, diseñadas para ocultar transacciones ilícitas y evadir impuestos.
Lo más preocupante es que entre los supuestos socios de estas empresas se encuentran individuos de sectores modestos, quienes desconocen que sus nombres están siendo utilizados para actividades fraudulentas. Personas como José Domínguez, un simple cuidacoches, han sido incluidas como accionistas en empresas como Gropek, sin su consentimiento ni conocimiento. Esta práctica cuestionable revela el nivel de engaño y manipulación utilizado por Villarreal y su red de complicidades.
Más de un Caso de Fraude dentro de Movimiento Ciudadano
Pero el caso de Villarreal no es un incidente aislado dentro de Movimiento Ciudadano. Recientemente, se ha descubierto un fraude millonario que implica directamente al candidato de MC al gobierno de Nuevo León, Samuel García, así como a su familia. Mariana Rodríguez Cantú, esposa de García, y José Gerardo Rodríguez Valdez, su suegro, están siendo investigados por movimientos bancarios y declaraciones de impuestos fraudulentas que suman hasta 180 millones de pesos.
Las indagatorias señalan que Rodríguez Cantú recibió grandes sumas de dinero en sus cuentas bancarias, las cuales no fueron correctamente declaradas en sus impuestos. Además, se han detectado operaciones sospechosas relacionadas con empresas fantasma, lo que sugiere la posible participación en actividades ilícitas como el lavado de dinero.
Familia de Samuel García Enfrenta Acusaciones
Por otro lado, Samuel Orlando García, padre del candidato, enfrenta acusaciones por evasión fiscal durante varios años, a pesar de ser socio de despachos fiscales y de abogados. Las transacciones financieras de García padre ascienden a 170 millones de pesos, una cifra que no puede justificarse con sus actividades comerciales conocidas.
La situación se complica aún más cuando se revela que empresas proveedoras favorecidas por el gobierno estatal han triangulado millones de pesos a un despacho jurídico en el que Samuel García y su padre tienen participación. Esta maniobra, que involucra a empresas como Suministro MYR y Proveedor de Productos Mexicanos Jace, es altamente sospechosa y sugiere un conflicto de intereses entre el gobierno y los intereses privados de los García.
En resumen, Movimiento Ciudadano tiene un historial manchado por fraudes y operaciones ilícitas que involucran a sus líderes y figuras prominentes. Desde redes factureras hasta evasión fiscal y conflictos de interés, las prácticas corruptas dentro de este partido político revelan una falta de integridad y una desconexión entre sus discursos públicos y sus acciones privadas. Es hora de que se haga justicia y se ponga fin a la impunidad que ha permitido que estos actos corruptos proliferen dentro de la política mexicana.