El trasvase de Nuevo León a Tamaulipas por fin fue definido y los volúmenes de agua acordados para este año son incluso superiores a los del 2019, esto a pesar de las declaraciones del gobernador Samuel García sobre “proteger” el abastecimiento.
Para este año el estado cedió un total de 200 millones de milímetros cúbicos, dicha cifra es elevada tomando en cuenta el almacenamiento actual de las presas La Boca y El Cuchillo (que tienen 389 y 756 millones de milímetros cúbicos, respectivamente). Mientras que, en 2019, sólo se aprobó ceder 150 millones de milímetros cúbicos (cuando La Boca tenía 560 y El Cuchillo mil 002 millones de milímetros cúbicos de almacenamiento).
Al respecto, el alcalde César Garza Villarreal expresó que esto es el resultado de la inexperiencia de Samuel García y lamentó que su negligencia en las negociaciones aumente el riesgo de afrontar una crisis de abasto aún mayor.
“Es una tragedia lo que a partir de mañana ocurrirá en Nuevo León”, expresó el presidente municipal de Apodaca, quien también criticó que el mandatario estatal haya permitido ceder más agua de la que se dio en años anteriores.