El avance de las obras en las nuevas Líneas 4 y 6 del Metro de Monterrey enfrenta serios problemas debido a la falta de recursos financieros, según lo declaró el Secretario de Movilidad de Nuevo León, Hernán Villarreal. Este proyecto de infraestructura, destinado a mejorar el sistema de transporte público y aliviar el tráfico en el área metropolitana, ha visto un progreso significativo pero lento, alcanzando apenas un 30% de su desarrollo. Villarreal explicó que los fondos asignados hasta el momento han sido insuficientes para sostener el ritmo de construcción originalmente previsto, lo que ha llevado a una pausa en algunas actividades clave.
Pese a este panorama, las autoridades mantienen la esperanza de reactivar las obras con mayor intensidad en 2025, siempre y cuando se apruebe el presupuesto necesario para el próximo año. El Secretario de Movilidad subrayó que, de contar con los recursos adecuados, las líneas podrían estar finalizadas antes de 2027, beneficiando a miles de ciudadanos que dependen del transporte público. Sin embargo, las recientes ampliaciones del proyecto hacia Santa Catarina y el Aeropuerto Internacional de Monterrey han añadido aproximadamente 12 mil millones de pesos al presupuesto inicial, generando mayores desafíos para su financiamiento.
Falta de financiamiento ralentiza obras
La falta de recursos se ha convertido en el principal obstáculo para el desarrollo de las Líneas 4 y 6 del Metro, un proyecto que había sido presentado como una solución para mejorar la movilidad en Monterrey. Según Villarreal, la ausencia de un financiamiento adecuado ha impedido que el avance supere el 30%, y esta situación podría prolongarse si no se garantiza un presupuesto sólido para el próximo año. Las obras, que comenzaron con una expectativa de concluirse en un plazo razonable, se han enfrentado a pausas y ajustes en el cronograma debido a esta limitación económica.
El secretario explicó que la falta de dinero no solo afecta la velocidad de las obras, sino también su alcance, ya que las extensiones planeadas para conectar Santa Catarina y el aeropuerto internacional implican un incremento sustancial en los costos. Originalmente, el presupuesto para estas dos líneas no incluía dichas expansiones, lo cual ha complicado la asignación de fondos. De los recursos necesarios, una gran parte estará destinada a cubrir estas nuevas rutas, que son clave para integrar mejor el sistema de transporte público en la zona metropolitana.
El avance de apenas un 30% refleja las limitaciones presupuestarias que enfrenta el proyecto, y, a menos que se logre un incremento en la asignación de recursos, es probable que el ritmo siga siendo lento. Villarreal reiteró que el gobierno estatal está en espera de la aprobación de fondos adicionales por parte del Congreso de Nuevo León, lo cual permitiría retomar las actividades en 2025 con mayor fuerza. Esta situación ha generado frustración en la población, que continúa enfrentando dificultades de movilidad mientras observa un desarrollo lento en las obras de infraestructura necesarias para mejorar el servicio de transporte público.
Extensiones elevan costos de construcción del Metro
Las proyecciones iniciales de costos para las Líneas 4 y 6 del Metro han sido significativamente alteradas por las expansiones hacia Santa Catarina y el Aeropuerto de Monterrey, lo cual ha añadido alrededor de 12 mil millones de pesos al presupuesto original. Esta cifra representa un desafío considerable para las finanzas del estado, pues el incremento no estaba previsto al momento de iniciar el proyecto. Las extensiones, aunque valiosas para mejorar la conectividad y facilitar el desplazamiento de los ciudadanos, han añadido una carga económica que actualmente el gobierno local está luchando por cubrir.
Hernán Villarreal señaló que el gobierno estatal sigue comprometido con completar la obra, pero reconoció que el aumento en el costo ha complicado la situación. Estas expansiones fueron consideradas fundamentales para conectar mejor la zona metropolitana con áreas clave como el aeropuerto y Santa Catarina, beneficiando a miles de usuarios que se trasladan diariamente por la ciudad. Sin embargo, estos beneficios adicionales vienen con un alto precio, lo que ha llevado a las autoridades a replantear la estrategia de financiamiento del proyecto.
A la espera de que el Congreso apruebe el presupuesto solicitado, la Secretaría de Movilidad continúa evaluando alternativas para reducir costos o gestionar el flujo de trabajo de manera más eficiente. Esto incluye la posibilidad de recibir apoyo de recursos federales o incluso la colaboración de la iniciativa privada para agilizar las fases restantes del proyecto. A pesar de los esfuerzos por encontrar soluciones, la comunidad de Monterrey sigue esperando un avance visible en las obras, mientras el gobierno estatal enfrenta un dilema financiero que podría afectar el cumplimiento del cronograma de construcción.
Gobernador busca agilizar aprobación de presupuesto
Ante la situación de incertidumbre, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha intensificado las gestiones para asegurar la aprobación del presupuesto que permitirá retomar las obras con mayor rapidez. La administración estatal ha manifestado su compromiso de concluir las Líneas 4 y 6 del Metro antes de 2027, pero para lograrlo, resulta imprescindible obtener los recursos necesarios. García ha instado al Congreso a acelerar el proceso de aprobación, argumentando que la falta de infraestructura de transporte público adecuado afecta directamente a la calidad de vida de los habitantes del estado.
El gobernador también ha destacado que las líneas de Metro no solo son un proyecto de movilidad, sino una inversión que tendrá un impacto positivo en la economía local, al facilitar el acceso de los ciudadanos a oportunidades laborales y comerciales en diversas zonas del área metropolitana. Asimismo, García ha señalado que la finalización de estas líneas contribuirá a reducir la congestión vial y a disminuir el tiempo de traslado de los usuarios, promoviendo un desarrollo urbano más sostenible y accesible.
A pesar de estos esfuerzos, la falta de financiamiento sigue siendo el principal reto. Samuel García y su equipo trabajan en colaboración con la Secretaría de Movilidad para explorar todas las opciones posibles que permitan finalizar el proyecto sin comprometer la calidad de la obra ni el bienestar de los ciudadanos. El gobierno estatal sigue considerando diversas fuentes de ingresos, incluyendo la posible participación de empresas privadas en algunos aspectos del proyecto, como la construcción de estaciones o la provisión de equipo especializado. Sin embargo, estas opciones están aún en fase de evaluación y no garantizan una solución a corto plazo.