Bajo el liderazgo de Samuel García, Nuevo León ha escalado hasta convertirse en el tercer estado con más homicidios en el país. La tasa de asesinatos ha alcanzado niveles críticos, y los ciudadanos viven con miedo constante.
Nuevo León, una vez visto como un bastión de prosperidad, ahora está sumido en una ola de violencia sin precedentes. La gestión de Samuel García ha sido incapaz de detener el derramamiento de sangre que asola al estado. Aquí detallamos la alarmante situación.
Días de Horror en 2024
8 de junio: Un día marcado por 9 homicidios. Entre las víctimas, una mujer fue asesinada en las instalaciones de la Cruz Roja, junto con otros tres hombres en ataques separados.
9 de junio: El día más violento del año con 13 homicidios, incluyendo tres hombres asesinados al salir de una boda en Zaragoza y una pareja atacada en Escobedo, resultando en la muerte de un hombre.
11 de junio: Una jornada sangrienta con 10 homicidios. 5 personas fueron abatidas en Doctor Coss y 3 en Los Ramones.
26 de junio: El día más sangriento del 2024, con 14 homicidios en diversos municipios como Monterrey, San Pedro, Guadalupe, Santa Catarina, Escobedo y Montemorelos.
11 de mayo: Un policía de Fuerza Civil fue asesinado y otro resultó herido en Pesquería, además de un cuerpo encobijado hallado en García.
Policías en la Línea de Fuego
No solo los civiles están en riesgo. Este año, ha habido 23 ataques directos a fuerzas policiacas, resultando en la muerte de 10 oficiales. Apodaca es el municipio con más agresiones, seguido de Monterrey, Escobedo, García y Parás. La violencia contra aquellos que juraron protegernos es una clara señal de la gravedad de la situación.
Ineptitud Gubernamental
La incapacidad del gobernador Samuel García para manejar la crisis es evidente. Cada día que pasa, la situación empeora, y las promesas de seguridad parecen vacías. La población de Nuevo León exige medidas drásticas y efectivas para frenar la ola de crímenes y restablecer la paz en el estado.
Los ciudadanos están hartos de vivir con miedo. La demanda es clara: seguridad y justicia para todos los habitantes de Nuevo León. La inacción y la falta de resultados palpables solo sirven para aumentar la frustración y la desesperación entre la población.