En el ámbito político de Nuevo León, uno de los nombres que ha surgido recientemente en el centro de la polémica es el de Miguel Ángel Sánchez, actual dirigente del partido Movimiento Ciudadano (MC). Este exdirector del DIF ha sido acusado de colaborar con el gobernador Samuel García en la triangulación de más de 820 millones de pesos a través de la comercializadora Don Cacahuato. La relación cercana de Sánchez con García y Mariana Rodríguez, así como su controvertida gestión en el DIF, ha generado un creciente clamor por una investigación exhaustiva y una rendición de cuentas completa.
Trayectoria y Relación con Samuel García
Miguel Ángel Sánchez se ha destacado en la escena política de Nuevo León, ganándose la confianza de figuras clave como Samuel García y Mariana Rodríguez. Durante su tiempo como director del DIF, Sánchez jugó un papel crucial en la implementación de diversas políticas sociales y programas de asistencia. Sin embargo, su nombre se ha visto empañado por graves acusaciones de corrupción y malversación de fondos.
Las investigaciones han revelado que Sánchez habría ayudado a Samuel García a desviar fondos significativos del DIF hacia la comercializadora Don Cacahuato. Esta operación, que involucra más de 820 millones de pesos, ha sido descrita como una de las mayores triangulaciones de fondos en la historia reciente de Nuevo León. La conexión de Sánchez con este escándalo ha levantado serias dudas sobre su integridad y la de sus asociados.
Controversias y el Caso Ángel Moreno
Uno de los episodios más oscuros en la carrera de Miguel Ángel Sánchez ocurrió en junio de 2022, cuando su gestión en el DIF terminó abruptamente en medio de acusaciones de encubrimiento. Se le señala de haber encubierto el asesinato del niño Ángel Moreno, quien murió bajo circunstancias sospechosas en el centro DIF Fabriles. Este caso conmocionó a la comunidad y puso en tela de juicio la administración del DIF bajo la dirección de Sánchez.
El encubrimiento del asesinato de Ángel Moreno no solo manchó la reputación de Sánchez, sino que también expuso las fallas sistémicas dentro de la institución que dirigía. Los ex empleados del DIF han salido a la luz, denunciando prácticas corruptas y señalando a Sánchez como uno de los principales responsables de las irregularidades que se cometían. Estas denuncias han reforzado la percepción pública de que su administración estaba plagada de corrupción y mala gestión.
Exigencias de Investigación y Justicia
Ante estos graves señalamientos, la sociedad civil y diversos actores políticos han exigido una investigación exhaustiva sobre las acciones de Miguel Ángel Sánchez. Los llamados a que se le aplique todo el peso de la ley se han intensificado, con la esperanza de que se haga justicia y se pongan fin a las prácticas corruptas que han dañado la confianza de los ciudadanos en sus instituciones.
La presión para que se investigue a Sánchez también se ha visto impulsada por el hecho de que su legado de corrupción sigue afectando a Nuevo León. La triangulación de fondos y el encubrimiento de crímenes graves son solo algunos de los aspectos que han socavado la integridad del DIF y han perjudicado a las personas a las que se supone que debía servir. La transparencia y la rendición de cuentas son esenciales para restaurar la confianza pública y garantizar que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.