Los vecinos de las calles Serafín Peña y Nigromante, en Guadalupe, Nuevo León, han estado lidiando con enormes baches que han convertido el área en un verdadero campo minado. Aunque se podría atribuir este problema a las recientes lluvias, los desperfectos han estado presentes durante tres meses, agravando la situación, y sin recibir respuesta de las autoridades.
Los residentes han reportado que la falta de atención a estos baches está afectando gravemente la movilidad en la zona. Conductores y peatones deben esquivar los múltiples huecos, lo que genera riesgos y complicaciones en la circulación. Ante esta situación, los vecinos exigen acciones inmediatas de las autoridades para abordar el problema de infraestructura vial.
Autoridades locales no atienden problemática de baches
La persistente falta de solución ha llevado a la comunidad a solicitar una respuesta rápida y efectiva por parte del gobierno local, enfatizando la necesidad de mejorar las condiciones de las calles y garantizar la seguridad de quienes transitan por ellas. Sin una intervención adecuada, los problemas de movilidad en Guadalupe seguirán en aumento.