En un polémico y cuestionable esfuerzo por combatir la sequía, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha implementado un programa de bombardeo de nubes que, a falta de evidencia científica que avale su eficacia, ha resultado en un gasto excesivo para el estado. Cada día de vuelo del avión King Air 250, adquirido específicamente para esta tarea, le ha costado a los contribuyentes un promedio de más de un millón de pesos.
Un Gasto Injustificado sin Resultados Visibles
Desde junio de 2022 hasta diciembre de 2023, se realizaron 161 vuelos en 132 días, lo que se traduce en un desembolso de un millón 022 mil pesos por cada día de operación. Esta cifra incluye el costo de adquisición del avión y otros gastos relacionados, que hasta la fecha han alcanzado la alarmante suma de 135 millones de pesos.
La comunidad científica ha expresado sus reservas respecto a la efectividad de esta técnica, subrayando que no existen pruebas concluyentes de que los bombardeos de nubes puedan generar lluvias de manera controlada y eficiente.
Millonario Contrato sin Garantía de Éxito
El avión King Air 250, adquirido a un costo de 70 millones de pesos, ha sido una fuente constante de gastos. Agua y Drenaje (AyD) de Monterrey celebró un contrato de renta por 7.6 millones de pesos antes de la compra para poner a prueba la aeronave, un gasto que se suma a los 21.5 millones de pesos contratados para el servicio de dispersión de químicos, que finalmente costó 25 millones de pesos.
Además, AyD y la Secretaría de Administración contrataron a una empresa por 3.8 millones de pesos para tramitar la matrícula del avión y su importación definitiva a México. Los gastos en mantenimiento hasta el 2023 suman 18.6 millones de pesos, sin contar los costos proyectados para 2024, que ya ascienden a 11.8 millones de pesos.
Gastos Adicionales y Sueldos Millonarios
Entre otros gastos, se incluyen 3.7 millones de pesos en seguros y 3.9 millones de pesos en salarios para dos pilotos, quienes reciben también prestaciones adicionales. La asesoría técnica ha costado 394 mil pesos, y el pago a un perito valuador ascendió a 150 mil 800 pesos. En combustible, se han desembolsado 1.9 millones de pesos.
En respuesta a una solicitud de información, la Secretaría de Administración reveló que diez personas están relacionadas con la operación del avión, incluyendo pilotos, técnicos y personal administrativo.
Falta de Transparencia y Críticas Ciudadanas
Las críticas no se han hecho esperar. Organizaciones civiles y ciudadanos han expresado su descontento con la falta de transparencia y la aparente ineficacia del programa. Señalan que estos recursos podrían haberse destinado a proyectos con un impacto más tangible y beneficioso para la comunidad, como la mejora en infraestructura hídrica o programas de conservación de agua.
El gobernador Samuel García se encuentra en el ojo del huracán, enfrentando cuestionamientos sobre la viabilidad y justificación de un programa que, hasta ahora, ha sido un costoso experimento sin resultados visibles. La ciudadanía clama por una revisión exhaustiva y un replanteamiento de las estrategias para enfrentar la sequía que afecta a Nuevo León.